Usera, el distrito con mayor concentración de población china de toda España –acoge la cuarta parte de los casi 36.000 chinos que viven en Madrid– y el barrio en que quiere crearse un chinatown al estilo neoyorquino, es también el epicentro de esta cultura en la capital. Aquí se acumulan la mayoría de los actos que celebran el Nuevo Año Chino, entre ellos, este año dos exposiciones muy diferentes.


La primera, Rojo, está firmada por Yue Yu, un profesor y pintor originario de Xi’an. A través de 23 obras comisionadas de pintura tradicional china, el artista indaga en las costumbres y la vida cotidiana de los pueblos agrícolas chinos e invita al espectador a asomarse a estos momentos de intimidad. Y todo bajo el prisma del color rojo, como un guiño que subraya el nexo de unión entre la cultura china y la española.


La segunda, La fiesta de la primavera, cambia la tinta china coloreada por fotografías y deja de lado la poética (aunque no del todo) para centrarse en una propuesta de carácter más documental sobre el Año Nuevo Chino desde diferentes prismas. Aquí hay rarezas –como la danza de los zancos en Zhouhan o la del dragón, a cargo de un grupo de estudiantes africanos– e imágenes de gran valor etnográfico.


La fiesta se recorre de principio a fin, desde el momento en que se acude a los mercados para comprar los preparativos hasta los papeles recortados que se pegan en las ventanas o los mantou, los panecillos con el carácter chino de prosperidad impreso en rojo. Además, los desfiles y celebraciones del evento en partes del mundo tan dispares como Singapur, Bueno Aires o la mismísima Usera, en Madrid.


- Rojo, de Yue Yu. Sala de Exposiciones de la Junta Municipal de Usera. Madrid.
29ENE25 – 28FEB25 - La fiesta de la primavera, de diferentes artistas. Sala de Exposiciones del Centro Cultural Usera. Madrid. 31ENE25 – 16FEB25
La imagen que abre el texto es Panecillos de «prosperidad» al vapor, de Zheng Lihong | EVG

