Estamos en Olite, en plena D.O. Navarra; pero, antes de contarte todo lo que puedes hacer en esta excepcional tierra, queremos explicarte que esto no es (solo) una copa de vino. Es el resumen concentrado de años de investigación y esfuerzo, de combinaciones arriesgadas, de apostar por un personalísimo sueño que comenzó en el año 2000, cuando la familia Masaveu –que cuenta con otras bodegas, como Fillaboa, de la D.O. Rías Baixas– compró los 14.000 m2 de esta finca situada a las afueras de Olite, la conviritió en Pagos de Araiz y plantó 240 hectáreas de viñedos con la firme decisión de crear los mejores vinos.
Pero, si tienes esta copa en tu mano, seguro que ya has atravesado el umbral de este magnífico espacio tipo château y has admirado su construcción, su escudo –que recuerda que la Casa Masaveu se fundó en 1840– y su cuidadísimo porche, y estás ya entrando en el corazón de la bodega. Es el laboratorio creativo del alquimista, el rincón donde Juan –el enólogo– y su equipo examinan calidades, combinan añadas, experimentan con levaduras propias y elaboran caldos únicos. Es también el espacio en el que reposan sus vinos, todos de la D.O. Navarra, que se extiende desde Pamplona hacia el sur de la provincia.
Aquí conocerás cómo se vendimian y elaboran sus vinos, la prensa de los blancos y el estrujado de los hollejos de las uvas en los rosados y tintos –el sangrado que marca la D.O. Navarra para estas variedades–, que es lo que aporta color y cuyos restos se emplean posteriormente en derivados como la cosmética o el orujo. También te explicarán por qué hay botellas que se colocan a mano y cómo conviven rosados frescos, como el Pagos de Araiz Rosé, con vinos más potentes, como el Blaneo Syrah, que envejece 12 meses en barrica.
Aquí, la tradición vinícola y la vanguardia tecnológica suman excelentes resultados que, además, se viven con pasión. El arte de elaborar un buen vino se convierte entonces en una experiencia inmersiva y multisensorial que comienza en el propio edificio –impresionante el techo, del siglo XV–, con una importante representación de la colección de arte de la familia Masaveu, que acompaña a la experiencia. También puedes disfrutar el arte con la Galería de Apóstoles y Santos situada en la bodega, bajo el edificio. O simplemente, mientras te sientas en el porche, contemplas los viñedos y dejas pasar el tiempo –clima mediterráneo en la piel–, viendo cómo crecen los futuros vinos.
Producción limitada (1.200 botellas), color pajizo dorado y una interesante combinación de frescura y complejidad. Así es Blaneo Chardonnay 2021, el D.O. Navarra de la gama Blaneo elaborado al 100% con esta variedad de uva. 13,60 €
Cinco de las siete variedades que se cultivan en la finca –tempranillo, merlot, syrah, cabernet y sauvignon– se alían para protagonizar Pagos de Araiz Crianza 2019, un sólido tinto D.O. Navarra de potente sabor, con 11 meses de crianza en barrica de roble. 6,40 €
Acostumbrado a los premios –ha sido Mejor Vino Rosado 2021 de la D.O. Navarra en la añada 2020–, Pagos de Araiz Rosado 2021 está elaborado con uvas 100% garnacha y es una apuesta segura y sorprendente, un vino equilibrado y elegante con aroma a frutas rojas frescas. 5,70 €
Bodegas Pagos de Araiz
Camino de Araiz, s/n. Olite 31390. Navarra
Pagos de Araiz organiza visitas de martes a sábados, en turnos de mañana y tarde, con un máximo de 10 personas. El recorrido (1 h 30 min; 20 €) incluye visita a la bodega y al proceso de elaboración, paseo por los viñedos y cata en el porche exterior de tres vinos –rosado, blanco y garnacha– con queso Roncal.
También ofrecen la posibilidad de alquilar bicis eléctricas para recorrer los viñedos y de organizar eventos en sus instalaciones, comidas de empresa, fiestas privadas e incluso bodas con un número reducido de invitados.