De los más de 20.000 castillos que siguen en pie en España, el centro peninsular acumula gran parte de ellos, como es el caso de Segovia (74) y Madrid (67). Son construcciones repletas de historia que narran nuestro pasado medieval y que han sabido adaptarse a los nuevos tiempos, pero dos de las más mediáticas, el Castillo Nuevo de Manzanares el Real y el Castillo de Pedraza, comienzan 2025 afrontando perspectivas muy diferentes.


El Castillo de Manzanares el Real –Castillo Nuevo de los Mendoza, para los amigos– ha cerrado sus puertas al público a partir del 5 de enero de este año. Desde este día, la duquesa del Infantado y propietaria de la fortaleza recupera su uso después de que venciera el contrato de gestión que mantenía con la Comunidad de Madrid. Las negociaciones siguen abiertas pero, de momento, este impresionante monumento del siglo XV –en el que se firmó el Estatuto de Autonomía de Madrid, en 1983, y se rodaron películas como El Cid o Simbad y la princesa– echa el cierre.


En la otra cara de la moneda, un peso pesado del turismo en Castilla y León, el Castillo de Pedraza, redobla su oferta en 2025. Sus nuevos propietarios –José Mota, Santiago Segura y Luis Álvarez– lo compraron el pasado verano a sus dueños, los descendientes de Ignacio Zuloaga, por 4,8 millones de euros. De momento, los planes de convertir esta villa segoviana en una especie de Festival de Edimburgo –con conciertos, eventos en Halloween, Navidad…– no se han materializado, pero el Gran Castillo de Pedraza ofrece visitas guiadas (6 €) por casi todas sus dependencias y destina sus patios para eventos en los que puedes, por ejemplo, celebrar tu boda organizada por el Grupo Life Gourmet.
La imagen que abre el texto es Castillo de Manzanares el Real | Ramón Durán. Wikimedia Commons