La tercera isla más pequeña de las Canarias exhibe un interesante catálogo 100% natural en el que hasta los cielos están protegidos. Tras la erupción del volcán Cumbre Vieja, en 2021, La Palma recupera la normalidad y despliega sus atractivos, como el encanto colonial e histórico que se concentra en su capital, Santa Cruz de la Palma.
1. Un cartel art déco
Nada más aterrizar en Santa Cruz de la Palma te recibirá el famoso cartel art déco que publicita Nitrato de Chile, un abono muy popular de principios del siglo XX. Su ubicación no fue casual, ya que está en la esquina de O’Daly, la calle más comercial de la ciudad, por lo que sería visto por todos los transportistas, empresarios y transeúntes que se adentraran en la ciudad.
Cartel de Nitrato de Chile, de 1929 | Carmen R. Pinos
2. Sotomayor, Salazar y otras casas señoriales
También en la calle O’Daly encontrarás la Casa Sotomayor y la de Salazar, con sus espléndidos patios y sus sillares en piedra volcánica negra. En todo el casco histórico abundan las casas señoriales –visita también la del Doctor–, con blasones y escudos, que dan fe de la riqueza que se vivió por estas tierras: el puerto de Santa Cruz llegó a ser uno de los más importantes de Europa, ya que era el último en la ruta hacia el nuevo mundo.
3. Una iglesia con mucho que contar
En la Plaza de España, disfruta la iglesia de El Salvador –fundada alrededor de 1500– y sus múltiples reformas, ya que, al igual que casi toda la isla, quedó destruida tras un incendio provocado por el pirata Le Clerc (Pata Palo). Te gustarán sus techos de estilo mudéjar, la imagen en mármol de El Salvador del Mundo –coronando la entrada principal– y la Torre del Reloj, del siglo XVI y con cuatro campanas.
4. Ayuntamiento con sabor marinero
Frente a la iglesia de El Salvador encontrarás el Ayuntamiento, avalado por Felipe II, el mismo que creó el primer juzgado de Indias en La Palma, con lo que todos los barcos debían registrarse aquí. La ubicación de La Palma, al oeste del archipiélago, la convirtió en objetivo de piratas –Le Clerc, el famoso Pata Palo, pasó por aquí– y en el tercer puerto más importante del Imperio español, después de Sevilla y Amberes. Estas Casas Consistoriales se construyeron tras el incendio de 1553, que destruyó gran parte de la isla, y son el mejor ejemplo de arquitectura renacentista civil canaria.
5. La librería con más encanto
En Álvarez de Abreu, la librería Trasera es uno de los espacios con más encanto de la ciudad. Eduardo, al frente de este local, comenzó, en el que fue despacho médico de su bisabuelo, una apuesta literaria en la que lleva ya más de 30 años. Desde entonces, se empeña en que nunca falten libros y pasión en esta capital isleña y ha convertido las paredes moradas de su local y el perro que recibe a los lectores en un emblema de Santa Cruz de La Palma.
6. Un teatro con mucha vida interior
La Avenida el Puente es una de las zonas más animadas de la ciudad. Aquí tienes el Teatro Chico, un espacio pequeño y muy querido en Santa Cruz, cuya obra se debe a la Sociedad Terpsícore y Melpómene, musas griegas de la danza y la tragedia, que transformaron lo que era el oratorio del Antiguo Hospital de Dolores y Concepción, actual Mercado de la Recova. Declarado Bien de Interés Cultural, funciona también como cine y, aunque la entrada está por la calle Díaz Pimenta, la trasera cuenta con una terracita muy agradable junto al mercado.
7. Guarapo, licor de plátano y otras exquisiteces
El Mercado de la Recova es el mejor sitio para familiarizarte con la gastronomía palmera y para saborear un guarapo de caña de azúcar y maracuyá preparado al momento con un trapiche azucarero. Además, licor de plátano, miel artesanal de La Palma, mojos canarios, gofio, sal, dulces, quesos y vinos con DO La Palma. Fíjate también en el estrecho contacto con Venezuela, la octava isla canaria, –hay arepas, hallacas…– y en la estética neoclásica de este antiguo hospital, con su lucernario central.