Efímeros y aromáticos, los eventos florales visten de color el espíritu más genuino y ancestral de cada territorio. ¡Bienvenidos a la fiesta de la primavera!
1. Keukenhof, el más bello del mundo

Decir Keukenhof no solo es hablar de un jardín, sino del que muchos califican como el más bello del mundo y uno de los lugares más fotografiados del planeta. Pero este espacio –situado junto a Lisse, 40 km al suroeste de Ámsterdam– no nació con vocación artística, sino comercial, cuando un grupo de productores de bulbos consiguió que les cedieran un parque cuya antigua propietaria, la duquesa Jacoba de Baviera, usaba para descansar y recoger plantas que luego cocinaban: Keukenhof significa jardín de la cocina. Tras dos años cerrado por la pandemia, este año el reino de los tulipanes dedica su edición a las flores clásicas. Hasta el 15 de mayo. Desde 18,50 €.
2. Arquitectura verde al sur de París


En plena celebración de su 30 aniversario, el Festival International des Jardins, en Domaine de Chaumont-sur-Loire, al sur de París, sigue siendo un referente de la cultura paisajística. Más de 300 equipos de todo el planeta expresan cada año el futuro de los jardines en proyectos que unen arte, ciencia y botánica. En esta edición, los participantes reflexionan sobre cómo debería ser un jardín ideal: obra de arte, huerto alimentario, espacio terapéutico, lugar de cultivo biológico… Del 21 de abril al 6 de noviembre. Desde 19 €.
3. Floralia, la gran fiesta de las flores en Bruselas

Pasear sobre una alfombra de flores silvestres, hacerte un selfie ante un corazón de tulipanes rojos, jugar en un laberinto con los colores del arcoiris… El plan forma parte de Floralia, la gran fiesta con la que la capital belga celebra el punto álgido de la primavera. Durante las cuatro semanas que dura la exposición –del 2 de abril al 3 de mayo. Desde 15 €– podrás admirar más de 500 variedades de tulipanes, jacintos y narcisos, una colección de rododendros y azaleas y los arreglos florales de los invernaderos, todo en pleno Castillo de Groot-Bijgaarden, un cuento de hadas a 7 km de la capital.
4. Chelsea Flower Show, de lo más ‘british’


Los jardines del Hospital Real, en el prestigioso barrio londinense de Chelsea, son el escenario donde se desarrolla el Chelsea Flower Show, una de las convenciones florales más antiguas del mundo. El nombre de sus organizadores, la Royal Horticultural Society, ya te da una idea de lo prestigioso del evento, uno de los preferidos de la familia real británica, encargada de inaugurarlo cada año. El festival está respaldado por la mismísima Reina de Inglaterra y atrae más de 160.000 visitantes y un buen número de gente guapa de la escena londinense. Del 26 al 28 de mayo –desde 48 €– puedes ver todo tipo de arreglos florales, jardines de diseño y parques aromáticos en sus 35 espacios temáticos. En los últimos años, el Great Spring Show, como también se le conoce, está cada vez más especializado en la vanguardia y explora lo que se cuece en el mundo de la jardinería, con propuestas extravagantes, como un Mini Cooper tuneado con flores o un vestido a base de pétalos.
5. Bulgaria celebra el Festival de la Rosa

No nació aquí, sino en Asia, pero la rosa damasquina se adaptó de tal forma a las tierras búlgaras que, desde el siglo XIX, toda la zona de Kazanlak, donde crece, se llama El Valle de las Rosas. En estos paisajes, que forman parte del Parque Nacional Los Balcanes Centrales, la vida y gran parte de la economía gira en torno a esta flor. Aquí encontrarás el Museo de la Rosa, que muestra la producción de aceites y aguas extraídas de esta planta, de los que Bulgaria es el mayor productor mundial, y el Festival de la Rosa: tres semanas –cuyo punto álgido es del 3 al 5 de junio– que incluyen el ritual de la cosecha (desde 5 €), la coronación de la reina…
6. ‘Infiorata’, la alfombra de flores de Genzano di Roma
¿Qué tienen en común Fucecchio (Florencia), Spello (Perugia), Noto (Sicilia) o Genzano (Roma)? Aparte de ser hermosas ciudades italianas, su pasión por la infiorata, es decir, la tradición de confeccionar alfombras de flores, generalmente para celebrar el Corpus Christi, que nació en Roma en el siglo XVII. Este año, puedes ver estas obras de arte efímeras del 18 al 19 de junio en diferentes ciudades de Italia.