Masónico, sostenible y, sobre todo, inmenso. De hecho, Il Labirinto della Masone es el laberinto más grande del mundo. Inaugurado en 1985, este majestuoso espacio está enclavado entre Parma y Fidenza, en un extenso territorio que ocupa la que era la casa de campo de Franco Maria Ricci. Este famoso editor y coleccionista italiano –fallecido en 2020– cumplió su sueño en este espacio: un lugar mágico y poliédrico, que puede disfrutarse desde diferentes puntos de vista y cuyo recorrido está acompañado de una extensísima colección de obras de arte.

El laberinto está hecho íntegramente con plantas de bambú de varias especies: alrededor de 200 mil en total, de entre 30 cm y 15 m de altura, una planta que llegó a su vida por casualidad, pero de la que se enamoró por su hoja perenne, su elegancia y su rapidez a la hora de crecer, además de por su capacidad para realizar la fotosíntesis. El camino que atraviesa el laberinto tiene más de 3 kilómetros de longitud y ¡ojo! porque no está señalizado de ninguna forma. ¿Te puedes perder? Por supuesto, pero no te preocupes: cada entrada lleva impreso el número de teléfono al que debes llamar para que vengan a socorrerte y te saquen de ahí.

Dentro de esta magnífica estrella de ocho puntas está también la colección de arte que fue atesorando Ricci con el paso de los años y que puedes ver en su totalidad. Se trata de un conjunto ecléctico con más de 500 piezas de arte de diferentes siglos donde conviven obras de Gian Lorenzo Bernini con otras de Wildt y Ligabue. La extensa biblioteca y las exposiciones temporales completan la oferta de este espacio carismático y 100% sostenible.
Il Labirinto della Masone
Strada Masone 121. Fontanellato. Parma
Entradas: 18 €
Abierto todos los días
Tras el paréntesis invernal, el Labirinto reabre sus puertas el 11 de febrero
El núcleo urbano más cercano al laberinto es el pueblo medieval de Fontanellato, a 5 km. Ahí puedes alquilar un coche hasta Il Labirinto, que dispone de un gran aparcamiento gratuito. Desde Fidenza, puedes coger el bus 2135 hasta Casalbarbato Campanella y caminar unos 20 min hasta la entrada del laberinto.
Qué maravilla! No lo conocía! La verdad es que conozco muy poco de Italia, cuál es el aeropuerto más cercano para ir? Mil gracias